TRIATLONREAL: TRABAJO, MUJER, HIJOS....

TRIATLONREAL: TRABAJO, MUJER, HIJOS....
10:50. FULL ICAN MALLORCA. TRABAJO DE EQUIPO.

jueves, 7 de junio de 2012

LA TRISUFRIDÍSIMA.

Ha nacido una estrella, y de la mano lleva un estrellado, al menos este año. En plena vorágine de pruebas y más pruebas a 120 euros para los primeros en inscribirse, inscripción ésta que debe cumplimentarse y por supuesto abonarse con más meses de antelación que los que dura un embarazo, aparece en el calendario un triatlón a 40 euros. Bueno, para ser justos no es un triatlón, y quizás eso fue lo que hizo que su número de participantes no fuese alto, pero para hacer honor a la verdad, por ese precio y con esas características, tal y como está el patio, solo le faltaba a la prueba un envoltorio con lazo y una tarjeta de felicitaciones. Osea, un regalo, obsequio, presente, premio, como querais llamarlo.

A priori iba a resultar duro, durillo, sería lo más correcto en función de las expectativas que me hacía acerca de la prueba. Un mini Titán, como decía alguno. Sin embargo resultó ser toda una encerrona. Una trampa mortal, al menos para el ego de algunos de los que allí estuvimos. Sobre el papel eran 57 kms. de bici desde Ronda hasta el pantano de Zahara donde debíamos subir Montejaque, que es algo así como La Arqueña con sobrepeso, pero ya está. Nadar 1000 metros en dicho embalse, que tampoco es para sentirse un David Meca. Montar de nuevo en la bicicleta tras el chapuzón y enfilar hacia Ronda esta vez subiendo el Puerto de Las Palomas, seguir hasta Grazalema, y tras subir Los Alamillos, que es como La Arqueña tras una dieta hipocalórica, girar a la izquierda para buscar Ronda definitivamente. Una vez en la ciudad del Tajo, no el rio sino el socabón serrano donde más gente ha dejado de pagar hipotecas porque sencillamente se han tirado al vacío y a un difunto queda muy feo mandarle la letra el dia 30 , debíamos cubrir 25 kms. a pie donde a priori la dificultad más grande la planteaban los 8 primeros kilómetros de ascenso hacia lo que llaman el vértice vertical o algo así, ya que sobre el papel el resto iba a ser llano.

Bueno, pues esto era el a priori. Todo muy objetivo. ¿De que color es el caballo blanco de Santiago?. Blanco. Punto. Se acabó. Sin embargo la realidad fue bien distinta, al menos para mi. Ya llevaba un par de semanas fallando en los entrenos más de la cuenta, por un lado debido a las molestias que desde el ICAN vengo arrastrando en el isquio derecho, y por otro lado porque en estas fechas el cuerpo se me pone como........ como una puta mierda, hablando claro. Me entre la desgana, la desmotivación, me vuelvo un flojo, y de todo pienso lo mismo: ¡¡¡¡¡A la mierda!!!!!, que diría D. Camilo José Cela. Hay dias, pero 3 de 5 es así, y así no, hijo no. Es curioso, porque pensaba en la prueba y me atraía mucho hacerla, aun sabiendo como sabía que me iba a pegar un palizón del 15, pero esa apetencia no se trasladaba en un plus de motivación para entrenar, para esforzarme, y eso no me gustaba, pero bueno, que iba a hacerle. Esto es como los toros, si sale malo mátalo rápido que se va a notar menos. Para colmo  de males, y nunca mejor dicho, dos dias antes de la prueba agarré un trancazo primaveral, yo lo llamo resfrialergia, y entre el hambre y las ganas de comer pues ya me direis. El jueves antes de la prueba tenía la napia como las cataratas del Niagara, y si no me soné 60 veces en un dia que me caiga redondo sobre el teclado iuafeeeeeeerg,leirg347i,  ostras, que cabezazo le he dado al teclado jajajaja. El viernes el torrente mucoso se redujo, pero el cuerpo se me puso que pensé que iba a ser el primer hombre de la historia en tener el periodo. Aun así, y como ya estaba todo organizado, planteado, ordenado, y todo lo que acabe en ado, pues decidí seguir adelante y tomarme la prueba con tranquilidad e ir viendo lo que el cuerpo fuese pidiendo.

A las 9:00 en punto del sábado comenzó la prueba. Tomamos la salida unos 600 participantes entre los cicloturistas de la prueba larga, unos 195 kms., los de la corta, unos 107 kms., los duatletas y los triatletas. Dadas las circunstancias me situé al final del pelotón, y según fuese viendo, ya iría pedaleando. El grupo empezó a estirarse, y estirarse, y estirarse. De pronto me sentí como Indurain..... pero Prudencio, el hermano del bueno, que no era malo, sino lento. Desde Arriate a Ronda la prueba tenía salida neutralizada. Unos 8 kilómetros que en teoría servírían para alcanzar posiciones punteras y que cuando la carrera se abriese poder pillar un buen pelotón cabecero que nos hiciese la carrera al menos hasta el pantano. Sin embargo el cuerpo me decía que tranquilo. Que hay más dias que ollas y que de sufrir en La Sufrida nasti de plasti. Ya con la carrera abierta y camino del pantano las sensaciones van mejorando y poco a poco voy alcanzando grupos a los que voy dejando atrás al ver que su ritmo era inferior al mio. Sin embargo, y a pesar de esa mejoría, no voy bien del todo. Mucho moco; el catarro se hace notar con el esfuerzo y veo que no voy muy fino.  Al llegar a las inmediaciones del embalse el cielo estaba encapotado y hacia hasta algo de fresquete. Incluso llegué a plantearme el nadar porque pensaba que salir mojado y tirar Palomas arriba iba a hacer que cogiera una pulmonía. Sin embargo, al llegar a la T1 veo a José Manuel y me animó a nadar y seguir al menos hasta la T2.

Natación sencilla. Un perico en una barca a unos 500 metros, bordearlo, y de vuelta. Por donde quieras, menos por la orilla, machote. Y así lo hice. Una semana antes había nadado en la piscina los 2000 en 31:30 con muy buenas sensaciones y de menos a más. Allí, como en toda la prueba, malas sensaciones, y de menos a menos aun. A pesar de ello salgo del agua bien, no sin dificultades ya que las gafas se habían empañado y  salí por encima de unas rocas, pero bien. Otra prueba superada.

José Manuel había nadado conmigo, y al salir del agua le pregunté que a que ritmo tenía previsto correr. El me dijo que en torno a 5:00 el kilómetro, cosa que vi factible para mi también, así que visto lo visto, y lo que veía venir, decidí buscar un aliado y le esperé mientras se paraba regar los alrededores. Fijaos como iba, que justo al pasar el puente que separa al embalse del aliviadero me fui a la cuneta. Solo. Yo solito. Me miré si llevaba el dorsal, no lo veía porque iba bajo el maillot, y cuando alcé la vista estaba cogiendo caracoles. Y me vio José Manuel. Y se rio. Y con razón. Ahí me di cuenta de la caraja que llevaba encima. El puerto lo subí mal. Peor que nunca. Con el 34 y el 27, y justito. De pena. En los cuatro últimos años nunca, pero ni en carrera ni entrenando he manejado esos desarrollos para subir ni El Boyar ni Las Palomas. Al menos casi desde el comienzo de puerto. Aun así, a mitad de la subida supero a Alba que incluso se me había escapado en las primeras rampas, y ya en sus tres cuartos me uno a Titanpuerto con el que haría casi todo el regreso a Ronda. A ambos se nos unió un tal Esteban, y un rato él y otro yo, fuimos tirando del trio hasta llegar al pie de la subida a Ronda, donde éste se puso a tirar llevándome tocado del ala pero al fin y al cabo llevándome, e incluso sacando de punto a Manolo. Al final conseguí aguantarle, y de Ronda a Arriate, que era en descenso, me puse a tirar yo aprovechando los ochentaymás. de bien nacidos es ser agradecidos.

En la T2 nuevas dudas acerca de si seguir o no. Y en esas que aparece Titanpuerto y me animo a seguir adelante. Y curiosamente aquí tuve las mejores sensaciones de todo el dia. Hacía calor. Eran algo más de la una de la tarde y salí del campo de fútbol de Arriate que era donde estaba ubicada la T2 con bastante optimismo. ¿A qué iba a arreglar todo el tinglado al final?. Así corrí al menos 2 kilómetros, hasta que el terreno se empezó a empinar. Vale. Cuesta arriba se anda rápido, y el resto a correr. Dicho y hecho. Hasta el kilómetro 7-8 que era ascensión adelanto a 4 o 5 corredores, y en el empinado descenso de ese vértice vertical adelanto a otros 2. La cosa marcha. Y ahora a llanear. A un ritmo algo más rápido a 5:00 voy por un camino en ligero descenso hasta que en el kilómetro 11 -12, justo después de haber pasado a otros 2 corredores el cuerpo me dijo se acabó. No eran las piernas que no podían más. Ni el cansancio propio de estas competiciones. Mi organismo se colapsó. Así de fácil. Como cuando en los dibujos animados el coche de Goofy se calienta y el tapón sale por los aires. Igual. Supe que no volvería a correr. Fijaos que al final de la prueba marqué 7:50, y durante el descenso empinado que antes os comenté recuerdo haber mirado el reloj y haber pensado en que bajar de 7 horas era más que factible. Calculo que eran las 14:30 más o menos, porque pensé, 15 kilómetros andando a 10 minutos el kilómetro, 2 horas y media..... Sobre las 17:00 en meta, osea 8 horas de prueba, y ahí, ahí que estuve. Poco más hay que contar. La cosa pudo incluso ser peor, porque en el kilómetro 16 - 17 la sensación de sopor hizo que incluso me marease un poco, teniendo incluso que caminar en plan paseo dominical durante un kilómetro hasta llegar a un avituallamiento donde me bañé literalmente. Poco a poco fui perdiendo posiciones hasta que en el kilómetro 23 Titanpuerto llegó a mi altura y firmamos la paz de Versales con un sincero "si tú andas, yo ando". Paseo de abuelos hasta el final charlando como dos viejos amigos y llegando a meta casi después de 8 horas de haber salido de Arriate.

Os digo una cosa, yo volveré. No se si el año que viene iré a Marbella, pero aquí seguro que vuelvo. Me encantan estas pruebas. Minimalistas. Los avituallamientos sencillos, un tenderete a base de palos y un trozo de tela con más boquetes que unas bragas de encaje, y para hidratarse un botijo con agua, otro con Coca-Cola y otro de isotónico. Y si no te gusta el búcaro, te rellenan las botellitas y a huir. Beber Coca-Cola en un búcaro, ¡¡¡Dios Mio!!!. ¡¡¡Que maravillosa profanación a la bebida refrescante más vendida en el mundo!!!. Kilómetros y kilómetros de prueba siguiendo un camino marcado por un trozo de plástico atado a una rama y ya está. La natación hasta el tio de la barca y vuélvete por donde puedas.... En fin, que a mi me gustó y que volveré si Dios quiere. Y desde aquí os invito a todos a que os animeis con esta prueba al más puro estilo far west que seguro, seguro, no os deja indiferentes.

4 comentarios:

  1. Descrito perfectamente, yo te acompaño el año que viene.Por cierto Alvaro no estaba a 50 segundos mamon...Tenia ganas de leer tu cronica, no sabia nada de ti, me tuve que marchar, por los crios estaban mas colorao que la nariz de un borracho.
    RUBIOCKS

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  2. No te preocupes. Si llegas a esperar hasta el final te tienes que llevar a los niños al hospital. Lo de los 50 segundos fue para motivarte jajaja.... Un abrazo mákina.

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  3. Pues si un multititán, ecotrimad granizado no con hielo, ICAN subebaja y todo un IM como tú las ha pasado putas, un pardillo como yo se queda a mitad de camino fijo, fijo. Menos mal que no me apunté... Has demostrado tenerlos bien puestos, para llegar a la meta por lo civil o por lo criminal. ¡Eso es un triatleta real, y no de diseño, sí señor!

    De aquí a octubre espero mejorar, sobre todo en la bici. Si en verano un día te apetece darte un paseo silbando tipo Javi/Pancho mientras yo voy con la lengua fuera, ya hablamos. Un abrazo.

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    1. Te tomo la palabra. Además estate atento a la página de la gente del 3okfit del Puerto. Organizan muchas cosas en verano en plan amigos pero "con cuchillo" y son gente muy maja. Como tú te vienes por la zona de veraneo te vendrá bien. Este año voy a Rota, también te veré en Sevilla si Dios quiere en el Tri Sur, y algo más seguro que cae. Queremos ahcer algún tripirata por la zona, o alguna travesía.... ya veremos.

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